Seleccionar página

La necesidad de poder consumir alimentos 100% naturales y frescos fue el puntapié inicial para que Patricia Honorato Quilodrán se convirtiera en una promisoria emprendedora. Hábilmente se dio cuenta que no era la única en Calama que demandaba este tipo de productos y así fue que nació “Maque, del campo a su mesa”.
Patricia comenta que iniciaron con la venta de tres productos (miel, nueces y maqui), los que se producen en el campo familiar que se ubica en la región de Biobío y que venden tanto en Calama como en Antofagasta. Hoy, tres años después esta emprendedora logró consolidar su negocio y también aumentar sus productos.
El camino, como toda emprendedora, no fue fácil especialmente por la falta de redes, sin embargo, ello no fue un impedimento para esta joven y comenzó pegando carteles en el sector centro de Calama ofreciendo sus productos.
Paralelamente comenzó a buscar ayuda y orientación en organizaciones como el Centro de Desarrollo de Negocios de Sercotec , Prodemu, Proloa, en esta última corporación se hizo merecedora de la distinción “Creciendo juntos”.
“Empecé a participar en ferias de emprendedores , todavía no tenía a mi hija, entonces ahí empecé a ser conocida de a poco, empecé a hacer redes con otras emprendedoras y cuando ya íbamos bien, creciendo al pasar de los años queríamos instalarnos con un negocio en el centro, creíamos que ese era nuestro paso y vino el estallido social”, relata Patricia Honorato.
Sin embargo, ello no fue un impedimento para seguir surgiendo y actualmente son una microempresa referente, reconocida y preferida del sector. En este sentido, Patricia hace un llamado a las mujeres que tienen ganas de emprender y a veces no se atreven y también, destaca la importancia de generar redes y buscar instancias de apoyo.
“Yo soy de la idea de que todo con trabajo y esfuerzo se puede lograr, es imposible que uno trabaje a conciencia, que trabaje con el corazón y le vaya mal, es difícil si es muy difícil, pero existen instancias donde uno puede pedir ayuda y seguir adelante”, dijo esta emprendedora.
Agregó que, “es tan importante ser independiente, sentirse económicamente independiente, uno se realiza como mujer, porque yo tengo una carrera profesional (ingeniera en biotecnología) y no ejercí un tiempo, y acá yo no tengo campo, sin embargo, desde siempre me gustó el desarrollo, la innovación, el emprendimiento y además que uno maneja sus tiempos, tengo la posibilidad de criar a mi hija, de trabajar desde la casa, entonces yo creo que hay que atreverse, pero buscar esa mano que te puede ayudar”.
Respecto a planes futuros, Patricia Honorato dice que quiere seguir consolidando su empresa y poder dar trabajo a más personas que la puedan ayudar en esta iniciativa de vender alimentos saludables. “Yo soy muy agradecida de Calama, porque Calama me ha dado lo que tengo ahora y es gracias a Calama”, finalizó.