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Estudió Ingeniería en Minas, sin embargo, tiene claro que su vocación es la práctica y enseñanza del voleibol.

La pasión por este deporte, llevó a Catalina Lucero Zúñiga no solo a ser seleccionada regional durante su etapa escolar, sino también a integrar la selección universitaria de Antofagasta, ciudad donde cursó estudios en Ingeniería Civil pero que aún tiene pendiente por concluir. 

Además, desde hace tres años preside el club Cavancha Open, además de realizar talleres en la Corporación Municipal de Deportes de Iquique y con el Instituto Nacional del Deporte (IND), ejecutar el Circuito de Voleibol Playa Cavancha Open, entrenar a la selección juvenil damas del colegio Lirima así como dirigir al equipo de damas y varones de Inacap. En suma, trabaja con aproximadamente 250 personas a quienes forma en esta disciplina deportiva.

La joven iquiqueña de 27 años contó que le bastó jugar un partido de voleibol en el colegio para “enamorarse” de este deporte. “Todo empezó a los 14 años en el colegio”, recordó.

Debido a que no estudió para impartir clases, Lucero decidió tomar cursos online y con la Federación de Voleibol.  “La verdad es que ningún trabajo que he tenido he postulado, la gente me ha visto y me han llamado”, comentó.

– ¿Te sientes una líder?

– La verdad que sí y lo más importante es ser una líder positiva, y creo que es eso lo que puedo destacar de mí. He tratado de tocar puertas y de repente no se abren, y he tratado de formar mis cosas sola. El deporte hoy en día muchas veces se ve ensuciado por personas, o por falta de disciplina de los mismos deportistas, y a eso a lo que yo apunto en mi club, las niñas saben que tienen que llegar a cierta hora, cumplir con cierto respeto, se hacen actividades a beneficio; como hacemos vóleibol playa una vez al mes, vamos a hacer limpieza de la playa… entonces son cosas que marcan la diferencia, no solo es  llegar y pegarle a la pelota, detrás hay valores y los papás están al tanto de eso…

– ¿En qué nuevo proyecto trabajas actualmente?

– Me gané un proyecto del IND que es un taller inclusivo para practicar vóleibol con gente discapacitada. Comienza los primeros días de septiembre y dura ocho meses, y no hay ninguna restricción.

 

– ¿Por qué optaste por ello?

– Tengo dos casos de niñas en mi club, una tiene autismo y otra parálisis en la mitad de su cuerpo, y aun así juegan vóley y se sienten totalmente desarrolladas haciéndolo.

 

– ¿Cuál es tu reto como entrenadora?

– Mi reto es mostrar el deporte iquiqueño. Siento que por ser zona extrema no se muestran los talentos que hay, y hay gente, pero solo falta un poco más de dedicación. La forma de mostrarlo sería que entren a la selección nacional o poder ir a competir en torneos nacionales.