Teresa Ramos, actriz y directora de teatro:
El teatro siempre ha sido parte integral de la vida y obra de Teresa Ramos, su entorno familiar y participación en actividades artísticas en sus primeros años de vida, fueron fundamentales en su desarrollo profesional. Actriz, directora de teatro, docente, parte del elenco histórico del Teatro de la Universidad de Antofagasta, ganadora del premio a las Artes Escénicas Nacionales Presidente de la República el año 2023, obtuvo este año el Ancla de Oro, galardón que consagra su aporte a la Región a través de las artes escénicas, apostando al desarrollo de la identidad cultural, patrimonio histórico y carácter social de Antofagasta.
¿Cuál es el origen de su pasión por el teatro y sus recuerdos de infancia vinculados a esta disciplina?.
Bueno, yo creo que mi gusto por el teatro viene de cuando yo era niña, como éramos cuatro hermanos y vivíamos en calle 14 de Febrero, teníamos un jardín grande, así que nuestra imaginación podía desarrollarse muy bien en nuestros juegos. No jugábamos tanto con juguetes, sino que nos entreteníamos en juegos grupales con un vecino que teníamos. Yo era la mayor, recuerdo que debía tener unos 10 o 12 años y naturalmente empezamos a crear cuentos, a hacer obras de teatro en el jardín.
Actúa en cine, en teatro, dirige obras, imparte talleres, organiza un festival y desde hace algunos años es abuela ¿Cuál es el secreto para mantenerse tan vigente y enérgica?
Mira, mi secreto es que cuando uno logra cosas, no son logros de una misma, son logros de un equipo. Y en el teatro es el logro de un gran grupo de personas. Entonces, realmente no son cosas que uno logra sola, siempre hay mucha gente detrás. Dentro del teatro lo principal es que seguimos manteniendo la formación, la mística, la fuerza y el profesionalismo para poder mantener la compañía, hasta el día de hoy, aunque contamos con menos actores, seguimos trabajando con cariño y pasión.
¿Cómo es el día a día de una familia dedicada al mundo del teatro?
Es muy divertido, resulta que cuando nosotros conversamos, generalmente a la hora del almuerzo conversamos sobre nuestras novedades y siempre invitamos a amigos, gente de Santiago o de otras comunas, amigos nuestros, entonces siempre estamos conectados con personas del mundo de teatro, realmente es entretenido porque siempre hay temas diferentes, hacemos comentarios acerca de las obras que hemos visto, son críticas más agudas porque hay más confianza, también por supuesto hablamos sobre temas mas complejos entonces se forma una dinámica muy bonita en la familia.
Es sabido que la gran mayoría de los artistas en Chile requieren de apoyo y aportes para desarrollar sus obras ¿Cómo ha sido su experiencia a la hora de requerir apoyo durante estos años?
Los primeros aportes fueron fundamentales claramente, al comienzo buscamos apoyo de la Municipalidad, el Gobierno Regional, y por supuesto Fundación Minera Escondida que ha sido esencial a la hora de financiar muchos proyectos. Gracias a esa ayuda es posible acercar las artes escénicas al público antofagastino. FITZA, por ejemplo, se financia en un 70% gracias a Escondida, lo que es un tremendo aporte para la región.
¿Hay algún sueño o anhelo que tenga para que seamos a una mejor región?
Hay un sueño que yo tengo con esto del teatro. Hay gente que se dedica al teatro con muchos años, que podría estar haciendo las clases de teatro, las academias de teatro, las academias de pintura, pintores, las academias de danza, bailarines, las academias de música, músicos, que en algunos colegios hay, pero no en todos los colegios. Imagínate si todos los colegios públicos de Antofagasta, tuvieran en la inversión que hace el gobierno en los colegios, esas actividades artísticas otro gallo cantaría.